Los 5 errores más comunes a la hora de contratar un préstamo

Los préstamos online al momento se han vuelto la inyección perfecta en el momento idóneo que muchas personas necesitan para imprevistos, reformas, vacaciones, ¡o lo que quieran! La facilidad con la que se otorgan ha llevado a que muchas personas cometan errores al contratar un préstamo que puede salirles muy caro.

Ya no necesitas dar explicaciones sobre para qué necesitas el dinero, y te ponen todo tan fácil, que es complicado resistirse a conseguir dinero fácil para nuestras necesidades o caprichos. Evita estos 5 errores:

1. Hacer caso a tus caprichos

El dinero fácil es muy atractivo, pero recuerda que hay que devolverlo. Piensa muy bien antes de pedirlo, porque si es para un capricho, en cuanto lo cumplas, es posible que te arrepientas de haber pedido un préstamo y te veas frustrado y demasiado justo para pagarlo.

Además, por suplir un capricho es posible que más adelante surja una incidencia y no puedas disponer del dinero, el cual ahora sí necesitas de verdad.

2. Pedir más de lo que necesitas

Es una tentación, todo fácil y una cantidad superior a la que necesitamos. Podrías hacer un viaje, comprarte la moto que soñabas o darte otro capricho.

Pero más dinero significa una letra más grande y más tiempo para hacerlo. Nuestra recomendación es que pidas lo justo y lo devuelvas en el menor tiempo posible. Te ahorrarás dinero en comisiones y podrás volver a disponer de dinero en cuanto lo necesites.

3. No tener conocimiento de las comisiones

Para no cometer errores al contratar un préstamo, asegúrate de conocer todas las comisiones que te van a cobrar. Pregunta sin tapujos, a fin de cuentas, es tu dinero.

Exige que te digan algo así como:

"Si pide usted 300 euros, lo puede pagar en tres meses sin intereses o en 6 con intereses. Si elige la segunda opción, el pago final serán 330 euros".

Piensa que los créditos online llevan altas comisiones asociadas que conviene conocer al detalle, así como comparar con otras entidades.

4. Aceptar productos vinculados

Es posible que te obliguen a contratar productos asociados al crédito. Pero esto no significa que tengas que coger cualquier cosa que no necesites o que no vayas a usar nunca.

Aunque quieran hacerte creer que estás obligado a contratarlos si quieres el crédito no es cierto. Tú tienes la última palabra, y si no, siempre puedes irte a otro banco o entidad financiera.

5. No conocer la diferencia entre TIN y TAE

Sí, son dos términos asociados a los préstamos que pocas personas conocen. El TIN es la Tasa de Interés Nominal y el TAE la Tasa Anual Equivalente. El primero se refiere al porcentaje por el que se multiplicará la cantidad solicitada.

El segundo, se refiere a los intereses anuales que te van a cobrar.

Por tanto, si no te la quieres jugar, no caigas en estos errores al contratar un préstamo que te comentamos. Asegúrate de leer la letra pequeña y de preguntar lo que necesites.