En Semana Santa no viajo ¿qué puedo hacer?

“¿Irme de vacaciones en Semana Santa? Cómo no pida un préstamo...”. ¿Te resulta familiar esta tesitura? Si eres de los que vas a pasar los días de Pascua en tu lugar de residencia, no desesperes. Te damos algunas sugerencias para que exprimas tus días de descanso. Son iniciativas que no requieren de un gran presupuesto. Además, están pensadas para días de lluvia o de sol. También, son planes para hacer con niños o sin ellos. Y si no te convencen, puede que te inspiren para dar con actividades más acordes a tus gustos. Vamos allá. 1) A la playa o barbacoa en el monte. Si ya sueñas con escuchar las olas, hazte unos bocadillos, llena el tanque de gasolina y acércate a la costa. Si la tienes lejos o eres más de verde, elige un lugar en el campo, a poder ser junto a un río, date un paseo y vete calentando la brasas para comer al aire libre... 2) ¿Y si te retas? ¿Quieres darle alas a tu autoestima y encima ponerte en forma? Puedes elegir la cima de un monte y subirla. O ponerte mallas y playeras y probar a salir a correr. Montar en bici o recuperar los patines constituye otra alternativa. También, si el Camino de Santiago pasa por tu localidad, puedes realizar parte de una etapa. 3) A cubierto, con brocha o delantal, si el tiempo no acompaña. Estos días los puedes aprovechar para redecorar tu casa, reordenarla o pintarla. También, cabe que pruebes a cocinar esas recetas que almacenas en tu libreta. O puedes abrirte a platos exóticos. ¿Te atreves? 4) En horizontal y a los chorros. Devorar libros o películas, sin salir de la cama o el sofá, no es mal plan. Además, lo puedes compaginar con una escapada al balneario que tengas más cerca. 5) Tarde 'cultureta'. Seguro que en tu pueblo, en tu ciudad o en los alrededores hay museos, fundaciones o casa específicas que nunca has visitado. ¿Te animas? 6) Y con niños... nuestras invitaciones son: manualidades en casa, ir a ver entrenar al equipo de fútbol, jugar a detectives por la ciudad, buscar experimentos para practicar, ir al cine, mejorar la técnica fotográfica en parques cercanos o coger un tren a un pueblo cercano donde pasar el día. 7) Una de varios. Otras posibilidades son disfrutar de la amistad en una terraza, llamar a amigos o familiares que no ves hace tiempo, escaparte al teatro o darte un paseo largo y sin rumbo. Párate y piensa. Siempre te quejas de que no tienes tiempo para... ¿para qué? Ahora te sobran los minutos, aprovecha y lánzate a vivir unos días inolvidables.